Durante el proceso terapéutico también buscamos entender cómo se ha llegado a la situación que te trae a consultar. Si bien no siempre es posible entender el por qué de lo que nos sucede, ni es el foco principal de la terapia, muchas veces es un alivio poder acercarse al origen o simplemente mirar el camino recorrido. Para ello, revisamos con curiosidad (y no con juicio) tu biografía y tu historia familiar. Este recorrido tiene como fin lograr un mejor entendimiento de ti mismo/a y crear una relación más amigable con tus circunstancias y tu entorno.
La terapia individual es recomendable para cualquier persona que, de forma voluntaria, desee modificar algún aspecto de su vida actual o busque un mejor conocimiento de sí mismo.
Algunos de los temas por los cuales podrías acudir a mi consulta:
- ansiedad, miedos y fobias
- ánimo bajo o depresión
- sentimiento de soledad
- burn out
- estrés laboral o personal
- relaciones conflictivas
- temas familiares no resueltos
- pérdidas y duelos
- confrontación con una enfermedad crónica
- dificultades con las diferencias culturales
- inseguridad o baja autoestima
- identidad sexual
- desorden alimenticio
- orientación vocacional
- conflictos en la pareja
- apoyo frente a una separación
PROCEDIMIENTO PARA INICIAR UNA TERAPIA